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Ilusionado con Galicia (Parte 2)

Vacaciones de pandemia en Galicia, disfrutando de la pesca submarina. Una historia de Aketza Alvarado.

Aketza continúa compartiendo sus vacaciones de pandemia en Galicia, unas vacaciones que se esperaban normalitas y acabaron dando resultados que recordará por mucho tiempo. Si aún no has leído la primera parte, la puedes recuperar Ilusionado con Galicia (Parte 1)

Tercer día de pesca

Este tercer día de pesca decidí meterme por una calita que tenía un acceso un poco más complicado, pero las ondulaciones de las olas en el mar delataban que era una zona muy amplia y con cabezos bastante alejados de la costa.

Una vez alcanzada el agua no sin dificultad descubrí que la zona era increíble, mucha más laminaria que en cualquiera de los otros sitios y con unos escalones, caídas y rocas a diferentes alturas que hacían que se viese una vida a la que no estoy acostumbrado en mi aguas vascas.

Mientras me alejaba más de la costa fui viendo algún congrio enorme, muy buenos sargos incluso algún sargo real de buen porte. Pero mi objetivo seguía siendo un buen róbalo, la captura del día anterior y la zona me daban buenas vibraciones. La laminaria me hacía difícil el verlos o eso creía, quizás simplemente no estaban allí, pero yo estaba convencido de que tenía que haber alguno.

Llegué a una zona que estaba llena de pez muy pequeño y que estaba muy junto, ahí todos los sentidos se pusieron a tope. Tras un par de esperas descubrí que lo que estaba dándose un festín era un grupo como de 10 dentones, dos de los cuales eran grandes. Las reglas del juego cambiaban, el que me conoce saber mi predilección por este majestuoso pez, y  ya no se me quito de la cabeza el poder capturar uno de los dos ejemplares grandes.

Tras varias esperas, acechos conseguí despertar la curiosidad de los todo el grupo menos de los dos grandes (siempre digo que por eso son grandes) tuve varios a tiro, pero yo quería uno de los grandes, en un par de ocasiones casi lo consigo en algún acecho, pero esta vez el resultado fue dentones 6 Aketza 0. Me vapulearon, así que otro día sin nada pero con una sonrisa de oreja a oreja, son de esos días que al menos yo no olvido.

“Me vapulearon, así que otro día sin nada pero con una sonrisa de oreja a oreja, son de esos días que al menos yo no olvido”.

La verdad que las imágenes eran preciosas, ver los dentones  por encima de esa frondosa laminaria era algo nuevo para mí, siempre los pesco en otro tipo de fondos y no esperaba para nada este encuentro. En casa también pensé que seguro que mientras estaba a los dentones seguro que por la laminaria andaba algún róbalo a comer.

Cuarto día de pesca

Tras un día de descanso y de disfrute total de la gastronomía Gallega, vuelvo al mismo sitio donde vi los dentones con la ilusión de intentar pescar uno. Cuando llego al sitio descubro que hay 3 barcos de profesionales llenando la zona de redes, así que mi gozo en un pozo.

Otra gran lubina en sus días de pesca por Galicia. Es una zona de grandes róbalos.

Cambié de zona, finalmente me metí por una cala de fácil acceso, este fondo era más plano y con unos con bastantes arenales y ya alejándote un poco de la costa la laminaria tomaba protagonismo. Este día no encontré tanta vida, sí que había sargos y alguna lubina pequeña, pero note que la zona, al menos ese día era más pobre. Pero a base de insistir, en un fondo de no más de 10m, donde parecía que terminaba la roca y empezaba la arena hice un pequeño acecho, recorriendo el borde de la roca con su majestuosa laminaria y al llegar a la punta me pose para terminar con una espera, en nada asomaron dos bonitos róbalos de la laminaria, no eran del tamaño deseado pero cuál  fue mi sorpresa que detrás les escoltaba un buen róbalo, me agazape un poco más y aseguré el tiro. Buen disparo, la lubina quedo inmovilizado en el acto. Otro día que la constancia me da sus frutos.

La vuelta hacia la salida fue también afortunada ya que en los arenales puede disfrutar de un par de preciosas rayas mosaico, encuentros de los que también disfruto mucho.

Quinto y último día de pesca

Como no el último día fui de cabeza al sitio donde vi los dentones, pero me volvió a pasar lo mismo, la zona estaba llena de profesionales así que muy a mi pesar volví a desistir.

Volví a la cala del segundo día, no había nadie en el agua, así que fui el primero en entrar, ese día me encontré después bastante gente en esa cala.

Mi objetivo estaba claro, intentar pescar un robalo pero grande de verdad, de esos que parecen de record. Pero mi chip cambio nada más empezar la jornada. En un fondo de no más de 8m, en un acecho descubrí un grupo de dentones, todos de un porte extraordinario, un banco de esos de ensueño, con los que siempre deseas encontrarte. Enseguida me di cuenta que si seguía acechando hacia ellos quedaría al descubierto y casi seguro que los espantaría. Así que muy suave volví por mis pasos para poder hacer una buena recuperación en superficie y prepararme para hacer otro acecho por otra parte y terminar en una espera en un pequeño saliente que me colocaría muy cerca de ellos.

“En un fondo de no más de 8m, en un acecho descubrí un grupo de dentones, todos de un porte extraordinario, un banco de esos de ensueño, con los que siempre deseas encontrarte”.

Dentón
El dentón es la pieza más preciada por muchos pescasubs, y la sonrisa de Aketza demuestra el orgullo de conseguir una captura así.

Todo fue saliendo perfecto, el acecho prácticamente como lo había pensado y el lugar de la espera me ofrecía el cobijo que quería, en un primer momento no había ni rastro de dentones, pero al de unos segundos  aparecieron, eso quería decir que había llamado su atención y que había posibilidad de capturar alguno (o al menos esa era mi ilusión). Cuando el banco empezó a acercarse me di cuenta que eran bastantes más de los que yo pensaba y que eran todos grandes  y de un tamaño parecido. Finalmente tras una buena espera y tras ir pasando ejemplares cada vez más cerca dos deciden acercase del todo, el segundo parece algo más grande, así que dejo pasar el primero y disparo al segundo asegurando el tiro, al instante ese ruido del carrete soltando hilo que tanto nos gusta. Aun así sigo concentrado en el lance, esto no ha acabado hay que recuperarlo y la fuerza que hacen y la que pueden hacer con esos troncos de laminaria es lo que más me preocupaba, pero el tiro fue muy certero y en segundos el dentón queda agotado y recuperarlo es fácil.

Al tenerlo en las manos  soy consciente de que el lance ha sido de esos de ensueño y que acabo de vivir un momento con los que siempre soñamos. Momento que grabe con la cámara y que se puede ver en mi video de YouTube “en busca de dentones”, aunque las imágenes no reflejen exactamente lo que viví es un buen recuerdo.

Después de colgar el bonito ejemplar en la boya insistí por la zona pero no volví a ver rastro de ellos así que me centre en buscar algún buen robalo y hacer la gran pareja, pero no alcance a ver ninguno de buen porte, el resto de la jornada transcurrió viendo algún bonito ejemplar de sargo y alguna lubina pequeña.

Después de estas vacaciones tengo ganas de volver por allí, esperemos que estas circunstancias me dejen visitar estas aguas pronto, ya que el recuerdo que me han dejado es imborrable.